En este POST, os contaremos la importancia de la luz y los efectos que provoca, en nuestro comportamiento diario y efectos en nuestro estado de ánimo.
El llamado reloj biológico, también llamado ritmo cicardiano, es como un cronómetro interno que se adapta a nuestra fisiología, a las diferentes fases del día y hace que experimentemos trastornos como el jet lag, cuando se produce un cambio temporal en nuestro entorno.
La vida en la Tierra, está adaptada a la rotación del planeta.
Plantas, animales y seres humanos somos capaces de anticiparnos al día y la noche para ajustar nuestro ritmo biológico en consecuencia.
En el siglo XVIII, el astrónomo Jean Jacques d’Ortous de Mairan se dio cuenta de que ciertas plantas abrían sus hojas durante el día y las cerraban durante la noche. Se preguntó qué pasaría si la planta fuera colocada en oscuridad constante y descubrió que, independientemente de la luz del sol, las hojas seguían abriéndose y cerrándose cada 24 horas.
Las plantas parecían tener su propio reloj biológico. No tardaron en darse cuenta de que estas oscilaciones biológicas eran una característica común de la mayoría de organismos vivos, incluidos los animales.
Fuente de información:
https://es.gizmodo.com/que-es-exactamente-y-como-funciona-el-reloj-biologico-1819049822
Es decir, el reloj biológico regula con precisión, funciones como el comportamiento, los niveles hormonales, el sueño, la temperatura corporal y el metabolismo. También hay indicios de que un desajuste crónico entre nuestro estilo de vida y el ritmo dictado por ese reloj biológico, acarrea un mayor riesgo de sufrir ciertas enfermedades.
La luz, el principal estimulo ambiental, que indica a nuestro reloj biológico que el día es para trabajar y la noche para dormir.
A pesar de esto, para aprovechar al máximo el día, se recurre a la luz artificial.
Gracias, a por ejemplo la tecnología de iluminación LED, simulamos el patrón natural de luz del día y así, provocar y conseguir el mismo efecto biológico que con la luz natural.
¿Qué influencia tiene la luz en nuestro estado de ánimo?
Luz ambiente: este tipo de luz, es la que nos puede ayudar a endulzar nuestros sentimientos, a crear un ambiente acogedor. Por ese motivo, los días de sol tendemos a estar más felices y contentos. Genera en nuestro cuerpo una activación espontanea.
Así como el descenso de la luz, hace que nos aumente la sensación de relajación, de bienestar, de calma, incluso melancolía.
Por eso, es tan importante la iluminación natural y artificial en nuestros hogares. Cada rincón es fundamental y no menos importe que otros.
Mientras la luz del sol esté en las calles, aprovecha para subir persianas, correr cortinas… que los rayos del sol entren a través de las cristaleras.
Y cuando el día este nublado o ya sea de noche, siempre se aconseja una luz de tono cálido, en las zonas comunes, como salón, dormitorios. Esto genera una sensación de calma y bienestar.
Así que, amigos… el sol, la luz, es vida. Aprovéchala al máximo y cuando nos falte, tener una buena iluminación en todos los rincones de vuestro hogar.